Dicen que la creatividad es la chispa del genio y de la innovación, de donde nacen los Einsteins, los Da Vincis y los Steve Jobs. Dicen también que todas/-os las/-os niñas/-os nacen con ella y que somos las personas adultas y las escuelas los que poco a poco se la vamos apagando.
Sin embargo, en la era de los datos y la conectividad, donde cualquiera puede acceder a casi cualquier información a golpe de clic, parece evidente que la creatividad será una de las habilidades que más se coticen.
Cómo introducirla en la educación es todavía un reto pendiente en nuestro país.

Qué es

Podríamos definir como educación creativa aquella que busca desarrollar la capacidad de producir ideas originales que tengan valor.

Por qué la necesitamos

El sistema educativo español, como todos los de nuestro entorno, surgió en el siglo XIX para satisfacer las necesidades de la época. Así, se asumieron valores típicos de la organización industrial como la jerarquía, la planificación, el control y la estandarización. Las/-os estudiantes aprendían a hacer lo que se les mandaba y memorizaban la mayor cantidad posible de conocimientos.
Poco ha cambiado desde entonces nuestro modelo educativo, que sigue basándose en el aprendizaje memorístico y los conocimientos teóricos, sigue evaluando mediante pruebas estandarizadas, y sigue penalizando los errores, lo cual no es otra cosa que penalizar la creatividad, ya que cuando un/una niña/-o tiene miedo a equivocarse, nunca explorará nuevos caminos ni encontrará soluciones originales.
La consecuencia es que muchas personas brillantes e inmensamente creativas creen que no lo son, porque aquello en lo que son buenas no se valora en las escuelas. Es evidente que las circunstancias han cambiado y que hoy en día aportan más valor capacidades como la de observar el entorno, relacionar conocimientos, tener ideas innovadoras y encontrar soluciones creativas a los diversos problemas. En otras palabras, hoy en día la creatividad es mucho más importante que los conocimientos teóricos y probablemente igual de importante que la mismísima alfabetización.

La inteligencia y la creatividad

El educador y escritor británico Ken Robinson apunta en su genial charla TED Schools kill creativity que, para contrarrestar la actual situación de inflación académica o “titulitis” y construir un modelo educativo de calidad para el mundo actual, es imprescindible redefinir nuestro concepto de inteligencia, que está muy estrechamente relacionado con la creatividad.
Robinson apunta tres características fundamentales de la inteligencia:

1. Es diversa
Pensamos en el mundo de todas las formas en que lo experimentamos, por eso existe el pensamiento visual, sonoro, cinético, abstracto, móvil. Desarrollar la capacidad de pensar de todas estas formas es desarrollar la inteligencia múltiple en toda su amplitud y diversidad.

2. Es dinámica
El cerebro no se divide en compartimentos estancos, sino que es un todo interactivo donde las distintas áreas se conectan entre sí. Desarrollar estas conexiones es desarrollar la inteligencia y, de hecho, la creatividad suele surgir de la interacción de diferentes disciplinas.

3. Es única
Cada persona tiene un talento diferente se ha de explorar y desarrollar. Para ilustrar esta faceta de la inteligencia, Robinson cuenta la historia de una niña nerviosa y con muchos problemas escolares a la que, en los años 30, sus padres acaban llevando a un especialista. El médico, tras dejarla a sola con música y observarla, “diagnostica” sencillamente que la niña no está enferma, sino que es bailarina. Tras pasar por una escuela de danza, Gillian Lynne, que así se llamaba la niña, fundó su propia compañía, fue responsable de algunas de las producciones musicales más exitosas del siglo XX y se hizo multimillonaria. Robinson reflexiona con ironía que otro médico posiblemente le hubiera dado medicación para que se tranquilizase, y que hoy le hubieran diagnosticado TDAH.

Educación creativa en Galicia
Si bien es cierto que la mayor parte de los colegios públicos, concertados y privados de nuestra comunidad empiezan a tomar conciencia de la importancia de creatividad e introducen poco a poco competencias relacionadas con ella, el modelo educativo no ha cambiado sustancialmente hasta el momento.
Por eso son tan interesantes las actividades complementarias y la labor que desarrollan organizaciones como Amadahi, que ofrece espacios naturales para una educación holística al aire libre que permita el juego, acoja la creatividad, y sea saludable y sostenible.
Son, sin duda, este tipo de iniciativas las que más están contribuyendo a la formación de personas con habilidades valiosas para el mundo que ya ha llegado.